Perforación de pozos de sondeo y recolección de muestras de suelo para análisis en laboratorio, evaluando su resistencia, composición y otras características relevantes.
Determinación de la capacidad portante del suelo, identificando posibles problemas como asentamientos, deslizamientos o licuefacción, y proporcionando recomendaciones de diseño y construcción.
Elaboración de un informe detallado que incluye los resultados de los análisis, conclusiones y recomendaciones para la construcción o uso del terreno.